lunes, 21 de diciembre de 2009

Esto se acaba...




En Las Vegas, donde dormí los primeros días en el USA Hostel cerca de Fremont Street, coincidí con Stephane y Gareth (francés y galés) con los cuales iría a recorrer durante tres días lo que nos diera tiempo en Utah y Arizona (Stephane tenía un coche alquilado y teníamos pensado hacer Grand Canyon, Monument Valley, Bryce Canyon y Zion NP). Así que un lunes salimos hacía Grand Canyon aún sabiendo que había previsión de nieve (de hecho esa misma mañana cancelaron algunas de las excursiones organizadas que salían hacia allí). De todas formas decidimos arriesgarnos, y hasta pasada la presa Hoover no hubo problema, parecía que el día iva a aguantar, pero después empezó a nevar y pasada una hora más la situación era ya insostenible. Tormentón de nieve, según las noticias americanas la peor tormenta de nieve en los últimos 15 años... Así que desistimos de llegar al Gran Cañón y buscamos un motel para dormir en Williams, pueblecito a unos 45 minutos de la entrada sur al Cañón y un clásico en la mítica ruta 66.

Las previsiones eran de tormenta durante dos días y nos temíamos lo peor, incluso barajábamos la opción de volver a Las Vegas... pero nada de eso! A la mañana siguiente despertamos con el coche enterrado en nieve (literalmente), pero hacía un día totalmente claro y soleado. Así que nos la jugamos y después de desenterrar el coche partimos hacia el South Rim (la entrada sur, la norte en invierno está cerrada). Me iva a tocar conducir durante tres días por encima de hielo y nieve cientos de kilómetros y sin cadenas, pero para mi sorpresa fue más fácil de lo esperado, ningún susto.
Así que en estas condiciones hicimos durante tres días el Gran Cañón (impresionante, qué grandiosidad, y nevado es precioso además de que disfrutamos ese día de una de las mejores visibilidades en todo el año), Monument Valley (brutal, me sorprendió gratamente), Zion National Park (el mejor para recorrer andando, tiene unas excursiones preciosas tanto en invierno como en verano) y Bryce Canyon (espectacular, quizá no tan grandioso como el Gran Cañon pero con más belleza). Vaya, que como había dicho anteriormente pensaba que después de Australia, Nueva Zelanda y otros países esto iva a ser más de lo mismo pero nada de eso, dejé algo de baba y se me pusieron los pelos de punta en cada uno de los parques nacionales que visité en EEUU, y después de ojear algunas fotos de los que no visité tengo claro que quiero volver para verlos todos!
Ya de vuelta en LAs Vegas nos alojamos una noche en el Stratosphere (el que tiene la torre más alta de todo el oeste de EEUU), ya que dormir en Las Vegas entre semana es bastante barato, de hecho nos costó una habitación doble con cama extra 42 USD (es decir, menos de 15 USD por persona, más barato incluso que el hostel). Después de eso me mudé otra vez al hostel durante el fin de semana y mis dos últimas noches las pasé en el Imperial Palace. Esos días aproveché para vivir un poquito más Las Vegas, fiestas en limusine, jugar en varios casinos, visitar los espectáculos gratuitos, club de striptease, pasear por The Strip (la calle donde están casi todos los grandes hoteles-casinos), por Fremont Street, etc. La verdad es que Las Vegas es para vivirla, tienes lo que quieras durante 24 horas al día. Y de Las Vegas volé a... Barcelona! Sí, de vuelta a casa, la verdad es que mientras volaba de vuelta la sensación fue algo extraña... Bien, todavía estoy aclimatándome (qué frío por aquí!); se acabó la vuelta al mundo 2009! (pero como muchos ya sabéis me voy enseguida hacia Bolivia a trabajar...). Muchas gracias a los que hayáis seguido este blog, ¡hasta otra!

jueves, 17 de diciembre de 2009

De camino a Las Vegas

Pues sí, en San Francisco me quedé hasta después del día de acción de gracias y algo más... En total estuve quince días, con Marcos y Andrés, un soriano y un colombiano que dormían en mi mismo hostel. Marcos se compró un autobús grande de pasajeros hace dos años, lo vació por dentro y lo habilitó para vivier en él y ha estado un año y medio recorriendo la costa oeste de EEUU de arriba a abajo. Un personaje genial, la verdad es que los tres lo pasamos muy bien viviendo San Francisco, por ese motivo me quedé más tiempo de lo esperado, un día incluso me tocó cocinar una paella para nueve comensales (salió bastante buena, todo hay que decirlo...).

En San Francisco viví el día de acción de gracias, con su típica cena con pavo al horno y fiesta posterior, y el consecuente Black Friday al día siguiente, es decir, el día que empiezan oficialmente las rebajas y el día en el que los descuentos son más salvajes; habréis visto en las noticias más de una vez la gente haciendo cola en la puerta de los grandes almacenes y entrando a codazos y pisándose unos a otros en cuanto abren... Pués ahora sé porqué, y es que realmente algunos descuentos son escandalosos! por ejemplo camisas (de buena marca) con una rebaja del 40-75% más otra rebaja añadida del 10-20%, y si le sumamos el cambio euro-dólar (1,5 USD por Euro aprox.) te sale la ropa tirada de precio! Los MACs ese día salían a mitad de precio de lo que cuestan en España, y los tejanos ("¿de Tejas?" como me dirían los sorianos, ya que en teoría se dice "vaqueros") de marca y último modelo salían a 30 euros o menos... Impresionante! Ese día hay ambientazo de compras por la calle, la zona de Union Square a rebentar y todo el mundo cargando cantidad de bolsas repletas, no me extraña, sobretodo comparado con los precios carísimos que tenemos en casi toda Europa para TODO. Aún sin tener en cuenta las rebajas la ropa ya sale algo más barata (por ejemplo camisetas de infinidad de marcas, buena calidad y diseños interesantes cuestan entre 20 y 30 dólares, es decir al cambio no llegan a 20 euros...), el comer en cadenas de Fast Food es barato (cómo me he puesto de 1/4 pounder Double Cheeseburguer por 1 dólar en el Burguer King!), se puede comprar en los supermercados grandes de forma muy económica... El alojamiento ya es otro cantar, dormir en un hostel puede costar de 24 a 35 dólares en las grandes ciudades (yo pagaba 32 en LA y 25 en San Francisco, Las Vegas es otro mundo), lo cual no resulta tan económico.

Desde San Francisco visité Yosemite National Park, tenía pensado ir en coche alquilado hasta Las Vegas pero en EEUU alquilar un coche en un estado y dejarlo en otro sale algo caro (incluso dejándolo en una ciudad diferente en el mismo estado), así que decidí hacer la visita al paque, volver a San Francisco y desde allí coger un autobús a Las Vegas. El parque, precioso, con El Capitán, Half Dome, algunas sequoias gigantes, ciervos, coyotes, etc. Después de haber visto recientemente algo de Australia y bastante de Nueva Zelanda tenía la impresión de que los parques naturales de EEUU no me iban a sorprender, y la verdad es que Yosemite no me dejó boquiabierto (aunque casi)... pero los parques que vería en Utah y Arizona dentro de unos días... wow, los pelos de punta! (os lo explico más adelante).

Las Vegas como es decía, otro mundo! El primer día que llegué me tocó salir de fiesta en limusine, ir a un club bastante decente en la azotea del Mandalay Bay (uno de los hoteles-casino más grandes en The Strip, la calle donde están casi todos los hoteles-casinos como el Mirage, el Bellagio, el Luxor, el Caesar Palace, el Excalibur, el MGM, el París París, etc.) y con vistas impresionantes de Las Vegas, y probar algo de suerte en alguno de los casinos que inundan las calles... Para vivirlo, pero lo cuento en el próximo post.