viernes, 9 de abril de 2010

¡Mi primer 6.000!



Día 1, Cordillera Real, 6:30 a.m.: los pies ya casi no responden, aunque más vale que lo hagan porqué dependo totalmente de ellos. Estamos en la pala grande, a punto de coronar el Huayna-Potosí, Álex (nuestro guía), Iñaki y yo salvando una pared de casi 200 m. con un desnivel máximo del 70%... Ha amanecido hace 10 minutos, vamos bien de tiempo pero debemos darnos prisa ya que a partir de ahora la nieve y el hielo empiezan a derretirse y todo se vuelve más peligroso. Cada paso es un drama, todavía no sé cómo he llegado hasta aquí pero hace ya rato que no hay posible vuelta atrás, los pies duelen, a 6.000 m. cada paso es un infierno, falta el oxígeno, me han traido por la ruta difícil de ataque a la cumbre, estoy cansado, estoy muy cansado, esto se hace interminable, empiezo a ver alguien arriba, gente que ha llegado a la cumbre por la cara fácil (por la difícil sólo nosotros), ya queda nada, el guía dice que 10 minutos más (¡eso es todo un mundo a estas alturas!), un esfuerzo más, estoy en plan Spiderman subiendo esta pared, clavando la punta de los crampones y el piolet (es la primera vez en mi vida que los uso), vamos en cordada de a tres pero sin asegurarnos a la pared, en ningún momento me he atrevido a mirar hacia abajo, ya queda poco, un minutito más y.....


Día -1, La Paz: coronar el Huayna-Potosí era uno de mis objetivos desde que llegué a Bolivia. Se trata de un monte de 6.088 msnm. situado en la Cordillera Real a escasos 25 Km. de La Paz. Dicha cordillera es un espectacular conjunto de montañas, entre las cuales destacan los nevados Illampu (6.485 m, el segundo más alto de Bolivia por detrás del nevado Sajama y dicen el más difícil de escalar), el Illimani (6.462 m. dominando el paisaje de La Paz) y hasta seis seismiles más. Entre ellos el Huayna-Potosí (6.088 m.) que tiene fama de ser uno de los más accesibles. Así que Iñaki, Pablo (mis amigos pilotos de Amaszonas) y yo nos decidimos a hacerlo en la modalidad de dos días, pasando de hacerlo en tres días como recomiendan algunos guías para gente principiante.

Día 0, La Paz, 10:00 a.m.: después de probarnos todo el equipo (llevaremos botas, crampones, pantalones térmicos, chaqueta térmica, pasamontañas, piolet, guantes, traje de escalada goretex, arnés, saco de dormir, linterna frontal, etc.) salimos desde La Paz hacia el campo base del Huayna-Potosí, situado a unos 4.700 msnm. Allí almorzamos y preparamos la mochila para subir hasta el Campo Alto (cada uno lleva todo su equipo a cuestas).

Día 0, Cordillera Real, 12:30 p.m.: salimos hacia el Campo Alto (5.130 msnm.). Tardaremos unas tres horas según el guía, caminando por terreno rocoso y en algún momento haciendo tramos pequeños de escalada. El peso de la mochila hace que la ascensión no sea nada cómoda, además que estamos casi a 5.000 m. y se nota la falta de oxígeno en cada inhalación al respirar. La subida no es del todo sencilla, sobretodo por el cansancio, empiezo a descubrir que esto no va a ser un paseo ni mucho menos. Los paisajes son preciosos. Los guías en seguida notan quién va más justito y quién va más sobrado, información que les servirá para manejar mejor al grupo al día siguiente (llevamos un guía para cada dos personas).

Día 0, Cordillera Real, 15:30 p.m.: llegamos al Campo Alto (5.130 msnm.). Algo cansado y hasta las narices de cargar con la mochila. Hace bastante frio. Ahora toca descanso, comida, matecito de coca, explicación del plan para el siguiente día y a las 18 h. a dormir, ya que tenemos que despertarnos a las 00:30 h. Siento un poquito de dolor de cabeza, estoy asustado por si me va a afectar la altura. Mucha gente lleva pastillas Sorojchipill para el mal de altura pero nosotros no llevamos nada. No duermo nada bien esa noche, suerte que almenos el saco de dormir es bueno y no se nota demasiado frio.

Día 1, Cordillera Real, 00:30 a.m.: nos despertamos (tampoco es que haya dormido demasiado), somos el grupo que se despierta más tarde para no coincidir todos en el vestíbulo poniendonos el equipo, lo cual sería un caos. Bajamos a cambiarnos y a desayunar. Hay que tomar mucho líquido, a poder ser matecito de coca (agua hirviendo a la que se le añaden hojas de coca y algo de azúcar al gusto). Estoy algo nervioso, hay dos personas que se sienten mal y ni siquiera salen con la expedición, otra también se queda asustada por lo "complicado" de la empresa (empiezo a notar que no va a ser tan fácil como alguna gente dice...). A la 1:30 h. salimos, somos los últimos y el guía nos dice que como máximo tenemos seis horas (en nuestro caso algo menos por haber salido los últimos) para llegar a la cumbre. Si no lo conseguimos habrá que cancelar y dar media vuelta ya que el sol hará que se deshaga un poco la nieve y el hielo y todo se vuelva más peligroso. Un australiano que viene en nuestro grupo se olvidó los crampones en La Paz, así que tiene que usar los de un guía. Este se deberá quedar en el Campo Alto así que iremos tres personas para cada guía en vez de las dos previstas. En nuestra cordada vamos Iñaki (que ya ha hecho bastante montaña antes), Pablo y yo (que somos totalmente principiantes en esto del alpinismo). Vamos con Álex (guía), todos atados a la misma cuerda a través de los arneses. Caminamos 2 minutos hasta el glaciar donde nos ponemos los crampones y empezamos la ascensión. No nos han explicado casi nada ni hemos hecho ninguna práctica previa, pero la verdad es que caminar por encima del hielo con los crampones parece facilísimo. En la mochila llevamos lo justo, gafas de sol, crema solar, 2 litros de agua cada uno y lo que nosotros llamamos las Bolivian Power Bars, unas barritas de cacahuete que venden en todos los chiringuitos de La Paz a un boliviano cada una.

Día 1, Cordillera Real, 4:10 a.m.: hemos llegado y pasado el Campo Argentino (5.425 msnm.). Mis problemas con la altura no han aparecido, pero la falta de oxígeno me está matando. Según el guía vamos bien pero algo lentos, Pablo va muy cansado y tiene que ir parando cada 15 segundos a descansar, a mi la verdad es que me van bien estas paradas, noto como en cada respiración honda mi cuerpo se recupera algo. Iñaki quiere ir más rápido pero de momento no se puede. Hemos visto gente que ya ha abandonado, y hemos adelantado a un par de grupos que van más lentos. Vamos con el frontal encendido ya que es completamente de noche. Ha salido la luna en la fase de luna creciente, ¡preciosa!. Un poco más adelante empezamos a ver en la distancia las luces de la ciudad de El Alto (justo encima de La Paz). ¡Resulta espectacular! En algunos planos paramos a descansar, beber agua y comer algo. No es hasta la pala pequeña donde realmente noto que estoy haciendo alpinismo. Una pequeña pared de unos 50 m. con una inclinación del 55%. Hay que subirla en plan Spiderman, y yo no he hecho eso nunca ni nadie me ha explicado cómo. Además hay un par de agujeros grandísimos a los lados. Me explican Iñaki y el guía sobre la marcha, clavo el piolet y las puntas de los pies en la pared (y por lo tanto las puntas de los crampones), y voy subiendo por la pared de ese modo. La verdad es que no resulta difícil, los crampones se agarran de una forma increíble a la pared. Estoy tan concentrado en la subida que en todo ese rato no noto ni el cansancio, y evidentemente no miro hacia abajo (tampoco se ve nada porqué es de noche).

Día 1, Cordillera Real, 5:30 a.m.: llegamos a la zona anterior a la última fase de ataque a la cumbre. Vamos callados, ya nadie habla, Pablo va cansadísimo, vamos parando cada 10-15 segundo a descansar otros tantos. Hemos adelantado a algún grupo más. Llevamos a un grupo detrás con un guía conocido como Super Mario que va silvando tan tranquilo. Iñaki le dice que o se calla o va a descubrir como se baja el Huayna-Potosí rodando (lo que pensamos todos...). Alcanzamos al otro grupo de nuestra misma agencia, que van con el guía Santos. Van más despacio y Pablo le dice a Álex que prefiere cambiarse a ese grupo. Así que en mi cordada quedamos Álex (el guía), Iñaki y yo. En ese momento ya hay algo de luz aunque todavía no ha amanecido. Vemos el camino por el que van todos los demás grupos hacia la cumbre, nos queda una hora y poco más. Álex nos señala otro camino más directo a la cumbre, la pala grande, aunque este es mucho más técnico y complicado. A Iñaki le falta tiempo para proponer subir por la pala grande y yo le contesto que no me toque las p... Pensaba que el guía se iba a poner de mi parte pero para mi sorpresa dice que me ve bastante bien y que cree que puedo hacerlo... Mi respuesta: "¿Os acordáis que es la primera vez en mi vida que me pongo unos crampones y uso un piolet?" Caso omiso... estoy acorralado, dos contra uno, me llevan al huerto y nos dirigimos hacia la pala grande. Voy algo nervioso, se trata de una pared de hielo impresionante de casi 200 m. y con un desnivel de hasta el 70%. Me dice Álex que van a ser unos 35-45 minutos "solamente". Empezamos a subir la pared y empieza a amanecer. Voy muy pero que muy cansado pero me noto bien, simplemente me impresiona la pared que estoy subiendo (vamos en cordada pero sin asegurarnos a la pared, si uno se resbala y cae en teoria los otros dos tienen que aguantar su peso). A los diez minutos... ¡problemón! Al guía se le rompe un crampón. Estamos allí parados unos diez minutos más, Álex parece que consigue atar los hierros del crampón con un cordón que lleva, va a intentar seguir. Ya ha amanecido completamente.

Día 1, Cordillera Real, 6:30 a.m.: los pies ya casi no responden, aunque más vale que lo hagan porqué dependo totalmente de ellos (...ver primer párrafo...)...., ya queda poco, un minutito más y.....¡Sí! ¡Hemos llegado a la cumbre! ¡Acabamos de coronar un seismil! ¡Espectacular! Me pensaba que habría algo más de espacio en la cima pero se trata de una simple cresta de hielo y nieve. Álex nos dice que no nos apoyemos demasiado en la cresta que se puede caer hacia el otro lado. Hay más gente en la cumbre, por el otro lado vemos la sombra proyectada del Huayna-Potosí, parece una pirámide y llega hasta el lago Titicaca (ver foto). La vista resulta increible, aprovechamos para sacarnos unas cuantas fotos y para disfrutar del momento, unos 10-15 minutos estamos en la cumbre y después comenzamos el descenso por la ruta normal. Y no parece nada fácil, el acceso a la cumbre por la otra ruta pasa por la cresta de la montaña, es decir, unos 50-100 m. andando por un caminito de 40-50 cm. de ancho y con precipicio a ambos lados. La verdad es que voy algo asustado, además Iñaki que va primero me dice que si él se cae a un lado de la montaña yo me tengo que tirar por el otro para hacer contrapeso y quedar los dos colgando.... Dios, ¡no quiero ni pensar en eso! Nos encontramos con el grupo de Pablo que está llegando a la cima, está destrozado, ¡casi ni nos mira! pero parece ser que el israelita va mucho peor, no puede casi ni caminar... Nosotros seguimos nuestro descenso (al final Pablo pudo llegar a la cima y bajar la montaña), la bajada se me hace interminable, me tropiezo y caigo un par de veces de lo cansado que voy, además el sol empieza a ser muy fuerte y molesta, el paisaje es precioso, unas grutas inmensas llenas de estalactitas y la ciudad de El Alto a lo lejos. En unas tres horas llegamos al Campo Alto, allí nos tumbamos una horita a esperar al grupo de Pablo y volvemos a preparar la mochila con todo el equipo para descender al Campo Base (se hace un infierno). En total habremos caminado unas ocho horas (cinco de subida más tres de bajada) más otras dos horas hasta el Campo Base, total unas diez horas, no está mal a esta altitud. Llegamos a La Paz hacía las 14:00 h. y nos vamos a casa a descansar. Para nuestra sorpresa Iñaki y yo no tenemos nada de sueño, únicamente dormimos una siesta de una horita y esa misma noche nos fuimos a tomar unas copas hasta las tantas (debió ser la adrenalina que llevábamos encima...). No voy a pisar una montaña así en mucho tiempo, creo que ha sido de las mayores palizas que me he pegado en mi vida, pero vaya ya puedo contar que... ¡he coronado un seismil!

10 comentarios:

  1. Que buenas fotos. Hice la misma excursion en enero pero no por esa ruta sino que subimos por donde vos bajaste , lo bautizamos " el sendero de la muerte". Vos tuviste suerte, al miedo de caminar con el precipicio a los lados sumale una avalancha a 100 metros mas abajo. Pero hacer cumbre es una sensacion unica. Yo llegue extenuado, saque fuerzas no se de donde pero pude llegar. Ahora estoy preparandome porque me gusto tanto que quiero escalar de nuevo a fin de ano, estoy pensando en el Illimani o illampu y de ahí volar a peru para escalar en huaraz. Un abrazo amigo, saludos desde argentina. Diego.si tenes informacion sobre los precios y la organizacion del illimani o del parque huaraz te agradeceria si me la podes pasr. Saludos! Diegopereyra15@hotmail.com

    ResponderEliminar
  2. que buen post!!! te pasaste por el detalle!!! andaba buscando algo como esto para el proximo verano!! al igual que Diego, te jodo con la info de precios y la agencia que la hiciste, pero de este mismo cerro por favor!! mi mail es jl_nilo@hotmail.com
    saludos desde La Serena, Chile!!

    Jose Luis

    ResponderEliminar
  3. Bueno tio, yo no sería capaz de describir la expèrencia mejor. Me identifico con el miedo y la falta de experencia, pero ha sido lo más bertia que he hecho en mi puta vida, parta mi ha sido toda una prueba de esfurzo y concentración. La verdad no me creo capaz de hacerlo de nuevo. Un saludo David Carpente...

    ResponderEliminar
  4. felicidades jordi!!!!
    Voy para allí en un mes. Un pregunta, cúanto vale aproximadamente subir al huayna potosí (guia, transporte, etc.)
    Gràcies ;)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, en función de la época del año y con quién vayas. Te cuesta todo incluido entre 80 y 100 US$. Si quieres una agencia especialista en alpinismo te recomiendo Altitud 6000, aunque el Huayna lo hacen todas, sean especialistas o no. Salut.!

      Eliminar
  5. Hey Jordi, felicidades por el logro. En fines de Febrero viajo a Bolivia, me gustaría en qué fecha escalaste y con qué agencia. Muchas gracias desde ya.

    Saludos :)

    ResponderEliminar
  6. Gracias Rocio! Yo lo hice a principios de abril... La verdad es que en época de lluvias no es la mejor opción, dependes mucho del día que haga cuando subas... La mejor época es a partir de abril. Casi todas las agencias hacen el Huayna, no es tan "complicado" como para requerir un super guía (pero en caso de que pase algo siempre es mejor llevar uno que sepa reaccionar). De todas formas una agencia especializada es Altitud 6000, en la C/ Sagárnaga casi esquina con la C/ Illampu.

    Saludos!

    ResponderEliminar
  7. Hola Jordi, Llenas tú, tu propio Equipo o lo alquilaste allí?
    Puedo ir yo sola con un guia o es necesario ser mínimo dos persones? Muchas gracias i felicidades.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola, puedes alquilar todo en las agencias, aunque alguna te diga que hay cosas que no incluyen otras te dan todo lo que te falte (si llevas equipo tuyo pues mejor). Dedican siempre un guía para cada dos personas, pero si quieres ir sola con un guía no hay problema, simplemente te cobrarán algo más caro seguramente. Saludos!

      Eliminar