miércoles, 29 de abril de 2009

Noroeste de Tailandia


Después de pasar el día en Ayuttaya visitando templos y ruinas cogí el tren nocturno hacia Chiang Mai (14 horas en segunda clase con litera, unos 12 euros). Al llegar conocí a Kyle, un canadiense con el que iba a compartir unos días por allí. Encontramos una habitación en creo que el mejor hotel en el que he estado hasta el momento por 300 Bhats (algo más de 3 euros cada uno). La estupenda piscina que tiene ayudó a que nos quedáramos 3 noches descansando y preparando una excursión de 3 días por la montaña (nos acabarían echando del hotel, según ellos porqué les espantábamos a los clientes diciendo que eran un poco careros con las excursiones, lo cual era verdad... de todas formas teníamos que irnos al trekking ese mismo día). También llegó Jeff, el irlandés, desde Indonesia. Quizá coincidamos en la ruta Laos - Camboya - Vietnam.
Hay que intentar ver todo desde su punto de vista positivo, y eso es lo que hicimos con el tema de las recientes protestas en contra de la monarquía y del gobierno en Tailandia. Resulta que el turismo ha caido un 40%, y eso se traduce en que por aquí estan como locos por conseguir clientes, a cualquier precio. Así que lo aproveché, tanto en el paseo en tuc-tuc por Bangkok como regateando precios de alojamiento como en el precio de la excursión de 3 días y 2 noches. Después de mirar y regatear conseguimos el trekking por 1.100 Bhats (unos 24 euros) cuando normalmente vale el doble o incluso más. De hecho más tarde comprobamos que gente de nuestro mismo grupo había pagado 2.000 Bhats por lo mismo, o incluso 1.600 Bhats por el trekking de 2 días y 1 noche...

El trekking... muy divertido aunque nada expectacular en cuanto a paisajes. Para hacer un buen trekking y llegar a sitios realmente auténticos hay que pagar bastante dinero. Aún así caminamos una media de 3-4 horas por día, dimos un paseo en elefante, hicimos "bamboo rafting", "white water rafting", nos bañamos en unas cascadas preciosas, dormimos en cabañas de bambú en medio de la jungla y visitamos dos asentamientos de tribus locales, los de las orejas perforadas y las famosas Long Neck (cuello largo). Choca un poco ver a las niñas y mujeres con los anillos en el cuello, sobretodo sabiendo que el orígen de esta costumbre fue hacer a las mujeres menos atractivas ante los militares que pasaban durante las guerras, para que no abusaran de ellas (y también para evitar ataques de tigre, que parece ser que se lanzan directamente al cuello).

Después del trekking otra noche en Chiang Mai y una hora de buen masaje tailandés (100 Bhats, algo más de 2 euros), antes de ir a Chiang Rai, Chiang Saen (Golden Triangle, punto de unión entre las fronteras de Burma, Tailandia y Laos, antiguamente uno de los mayores puntos para el tráfico de opio) y Chiang Khon donde está la frontera con Laos. Como habréis visto en las fotos Tailandia es un país mayoritáriamente budista, así que visitar templos es lo habitual en cualquier pueblo, ya que éstos no son especialmente bonitos por ellos mismos (los templos sí, aunque son casi todos iguales). En uno de ellos me senté un rato a jugar a las damas con los pequeños monjes budistas, una experiencia muy bonita.

Al final he hecho Tailandia en mucho menos tiempo del previsto (menos de 25 días) y no me ha sorprendido excesivamente, aunque algunas zonas del sur son especialmente bonitas, la gente es muy agradable y la comida bastante mejor que en países vecinos. Sigo comprobando que cuantas más expectativas tienes de un país más difícil es confirmarlas, en cambio cuando vas sin ellas es muy probable acabar sorprendido... Nos vemos en Laos!

sábado, 18 de abril de 2009

Un paseo por Bangkok

A Bangkok llegué a las 3 de la mañana, las calles repletas de militares por el tema de las recientes protestas, aunque no he visto ningún altercado en los días que he estado por aquí. La verdad es que me gustan las ciudades, y en un par de días ya me había hecho con Bangkok, encontrado un alojamiento cómodo, los sitios baratos para comer (los restaurantes locales por donde de vez en cuando pasa una rata por debajo de las mesas y nadie se inmuta, ni siquiera yo...), me movía en bote, en autobús, en skytrain... Las guías de viaje no dejan de avisarte que tengas cuidado con los tours prometidos por los conductores de tuc-tuc, ya que normalmente esconden visitas a tiendas para turistas con precios desorbitados. Pero a veces eso se puede volver a tu favor, como me pasó a mí.

El caso es que todavía no sé muy bien cómo me encontré sentado en un tuc-tuc que me prometía un tour de 3 horas por los principales templos de la ciudad por 20 Bhats (el litro de gasolina ya cuesta de 25 a 30 Bhats y normalmente 1 hora de tuc-tuc va a más de 100 Bhats!). Evidentemente dije que sí y me la jugué. Así que Misho, el conductor, me llevó a ver un par de templos y después me desveló el truco… “tienes que entrar a unas tiendas, sólo looking looking, no hace falta que compres, hazlo por mí”, y evidentemente le dije que sí, faltaría más, me estaba llevando a ver la ciudad casi de gratis…
La sorpresa fue al entrar a la primera tienda, trajes y camisas. Con la pinta de traveller que tenía y los más de 40 grados que hacía en la calle poco negocio iban a hacer conmigo… y así fue, a los 2 minutos estaba saliendo de la tienda, aunque antes el pobre vendedor intentó colocarme una esponja con jabón incorporado para travellers por 180 Bhats (me quedé con las ganas de decirle que por ese precio podia comprar 20 esponjas en el super).


Siguiente parada: una oficina de turismo. Bien! Tenía preguntas que hacer sobre trenes y autobuses públicos… pero nada de eso, me dijeron que solo vendían paquetes turísticos, así que a los 30 segundos de entrar ya salía. Entonces Misho me miró desesperado y me dijo: “No, así no, tiene que parecer que estas interesado, y tienes que aguantar unos 20-30 minutos dentro!"... OK, lo siento! En la siguiente tienda ya era todo un experto. Aguanté 20 minutos mirando catálogos de Armani y demás, y funcionó! Me ofrecieron hasta bebida gratis! (me tomé un refresco con lo cual incluso amortizé los 20 Baths... la verdad es que hasta tenía ganas de entrar en las tiendas entre templo y templo por lo del aire acondicionado; menuda calor en la calle!!). Los precios en las tiendas son incluso a veces más caros que en Barcelona; estuve a punto de decírselo a un grupo de matrimonios de Canarias (almenos eso creo, por el acento) que estaban bebiendo cerveza gratis y comprando como locos, pero se les veía tan contentos que
me hice el sueco (nunca mejor dicho porque me confunden bastante con ellos...) y no les dije nada.
Siguiente tienda: joyería. Más difícil todavía ya que mi interés por las joyas es igual a -10. Pero aguanté, que si zafiros, rubíes, diamantes, oro amarillo u oro blanco, etc., incluso cuando la mujer me dijo que comprara algo para regalar a mi novia... Que no tengo novia! Tan raro es? (es que no paran de preguntármelo en cada país, en India, Indonesia Malasia y Tailandia sobretodo, incluso en Malasia chicas musulmanas de las que van tapadas hasta arriba me venían a preguntar riendose que porqué iba solo y que dónde estaba mi novia...). En fin, que le vine a decir a la mujer que cómo se pensaba que iba a comprar un anillo de mínimo 200 euros sin saber si lo que había en él eran realmente diamantes y rubíes o un simple trozo de plástico de colores... Me pasó a la tienda de souvenirs en la cual tampoco piqué, aguanté mis 30 minutos y adiós... prueba superada!
A todo esto íbamos intercalando visitas a los templos prometidos, a cual más bonito (ver fotos), acabando en la zona del Grand Palace y el Wat Pho (al que me colé por una puerta de servicio "sin querer" y no pagué). Así que al final me salió la ruta casi gratis, con paradas en sitios con aire acondicionado y refrescos gratis para descansar. A parte de los templos también visité Chinatown, Siam Square area, el Night Bazar, Kao San Road area, etc. Estuve unos 5 días en Bangkok y la verdad es que lo disfruté mucho!

martes, 14 de abril de 2009

Islas y playa... y más islas y más playa...


... Eso es básicamente el sur de Tailandia. Y por eso al final mi ruta se quedó recortada a Krabi y Koh Pha Ngan, no porque no sea bonito sino porque a mi la playa me cansa rápido y además es algo caro (comparado con otras partes de Asia) moverse y dormir por aquí, especialmente yendo solo. Ni siquiera me pasé por Koh Tao a sacarme el PADI como tenía previsto, por falta de ganas y por tener un costipado con tendencia a sinusitis que no me hubiera dejado hacer submarinismo de todas formas.

Durante estas semanas he sufrido el primer bajón importante del viaje, entre desubicado, sintiendo añoranza y aburrido (en eso la playa no me ayuda demasiado). A veces no es fácil gestionar tanta libertad y tanto tiempo ocioso, sobretodo porque normalmente no estamos acostumbrados a ello. Algunos días te preguntas: y qué hago ahora? O a dónde voy mañana?... Además de hechar de menos amigos, familia, y cosas básicas y simples como estar tranquilamente en casa o poder abrir tu nevera y prepararte lo que te apetezca en ese momento. Así que no os penséis que es oro todo lo que reluce, en el blog sólo queda reflejada una parte del viaje, hay muchas otras cosas que no, como el día a día, a veces muy intenso y otras veces aburrido, malos momentos porque uno se siente sólo, incómodo, cansado, con hambre y sin poder encontrar comida, etc. u otros buenos momentos o sensaciones, como cuando has conocido a alguien interesante en un viaje de autobús de 12 horas y almenos puedes tener una buena conversación, como cuando hablas con gente local y dices un par de frases en su idioma y te sueltan una sonrisa, como cuando disfrutas de una buena comida local, etc. Despues del primer mes te empiezas a dar cuenta de que no estas simplemente de vacaciones, hay mucho más... y ese mucho más, sea bueno o no tan bueno, es lo que provoca el darte cuenta de muchas cosas, aprender con ello y crecer en muchos sentidos.


Despues de este aviso para navegantes contaros que al ir solo me tocó pagar unos 6-7 euros por noche en el sur de Tailandia (excepto 3 noches que compartí bungalow con Florian, un alemán que conocí de camino a Koh Pha Ngan), una barbaridad comparado con lo que pagaba hasta ahora. Sorprendentemente la comida es proporcionalmente más barata que en otros países, a partir de 0,5 euros se come algo en la calle, y por 2 euros se comen platos más elaborados y riquísimos! La gente otra vez muy amable y con un acento muy gracioso.


Krabi me pareció espectacular (las playas que más me han gustado hasta el momento, sobretodo Ton Sai y Pranang Beach) y Koh Pha Ngan es una isla llena de playas bonitas y mucho ambiente nocturno. Llegué para la Full Moon Party pero estuvo lloviendo casi toda la noche así que no fui, pero me pasé por otras fiestas en la playa (alquilé una moto durante unos días), en un acantilado con vistas a la playa (Back Yard) y otra en medio de la jungla (Jungle Experience). Tampoco disfruté demasiado de estas fiestas, lo que sí me pareció curioso y divertido fue la celebración del año nuevo tailandés, la gente en la calle durante 3 días con música en todos sitios y en medio de una inmensa guerra de agua y harina.

Parece que ha habido problemillas en Bangkok, protestas en contra del primer ministro otra vez, aunque me dicen por aquí que ya esta solventado, asi que me ire para allí que necesito un cambio de aires y dejar la playa de una vez! (por cierto creo que por segunda o tercera vez en mi vida estoy bastante moreno...).

domingo, 12 de abril de 2009

GP de F1 en Sepang, Malasia

Como algunos ya sabéis me gusta mucho la Fórmula 1, así que volví a Kuala Lumpur para asistir al GP de Sepang, circuito precioso a unos 50 km de la capital. Ya había comprado mi entrada de general con cubierta (lo cual a la postre fue un gran acierto), y fui directamente a instalarme al Oasis Hostel en Chinatown.

Allí conocí rápidamente a gente, y me junté con Gabriella y Thomas que también asistían al GP. Gabriella es una solterona suiza (así se define ella misma) que se dedica al taxi, sobretodo por las noches y para llevar a millonarios al casino de Luzerna. Algunas veces éstos la llaman cuando ya van algo borrachos para que les lleve de vuelta a casa conduciendo sus Ferraris... Thomas es polaco y fan de Kubica (piloto polaco del equipo BMW) que ha venido en bici desde su país para asistir al GP. Sí sí, en bici, ha tardado 6 meses y ha recorrido unos 12.000 km atravesando países como Irán, Pakistán, India, etc.

Las sesiones del viernes fueron entretenidas. La entrada era libre a la zona de rectas y boxes, así que seguí de cerca el box de Renault y a Fernando Alonso. A parte de la F1 se celebraban sesiones de GP2 y Fórmula BMW.

En las sesiones de clasificación conocí a Juaquín y Paola, una pareja de sevillanos recién casados y de camino a Vietnam para su luna de miel. Me dijeron que tenían algo de jamón y queso para la carrera y creo que esa noche soñé con ello. El domingo me volví a juntar con ellos y... me habían traido un bocata de jamón serrano! Con pan de payés y todo! Fue genial! Chicos os debo una muy grande... También nos juntamos con una pareja de Tarragona que llevan 8 meses viajando por el mundo. La carrera... ya sabéis como acabó, un simple chaparrón en la vuelta 32 y adiós... aunque me supo peor por el polaco, ya que Kubica abandonó en la segunda vuelta.

Después de la carrera y ya sin lluvia conciertazo de Jamiroquai como fin de fiesta en el circuito. Brutal! Al final fue un fin de semana bastante completo y divertido. Próximo destino: Tailandia.

sábado, 4 de abril de 2009

Dos semanas por Malasia

...Así que nos fuimos hacia Cameron Highlands, Perhentian Islands y Taman Negara. La verdad es que Malasia es básicamente una jungla inmensa con algunas islas alrededor.

En Cameron Highlands hay unas plantaciones de té bastante bonitas de visitar, aunque despues moverse desde allí a otros lugares no resulta barato. Nos costó 140 RM ir a Perhentian Kecil, una isla paradisiaca de la costa nordeste. Nos alojamos en un bungalow en Long Beach por poco más de 2 euros la noche por persona, y con algunos visitantes un tanto extraños... Yo no sabía que la isla esta llena de lagartos inmensos tipo los de Komodo, vi uno que debía hacer metro y medio. A parte de zanganear (sobretodo de 9 a 18 horas, ya que con el sol que pegaba cualquiera salía ha hacer nada!) hicimos snorkel un día, viendo entre otras cosas tortugas gigantes, algunos clown fish (más conocido como Nemo) y tiburones! Sí, algún black-tip reef shark de un metro o metro y medio máximo. De la isla fuimos a Kota Bharu, un pueblecito con encanto y con la comida buenísima y bastante barata. Allí me despedí de Joan, ya que yo me volvía a KL para el Gran Premio de F1 y él se iba directamente para Bangkok. Además tenemos planes algo diferentes, así que no sabemos cuando volveremos a coincidir. En Taman Negara (la jungla) vi un lemur volador con un par de crías y hice un trekking de unas 5 horas, la verdad es que es bastante impresionante caminar por allí y pensar que hay elefantes, tigres, leopardos, etc. viviendo de forma salvaje (aunque hay que hacer trekkings de mínimo 7 días para tener alguna posibilidad de verlos...).

En Kota Bharu me pasó una de esas cosas que te hace ver lo diferentes que somos los occidentales para según qué tipo de cosas... Me senté a comer en un restaurante Indio y un hombre mayor que tenía en frente me miraba con curiosidad, se notaba que quería hablar conmigo, así que le sonreí y se acercó a preguntarme 4 cosas. Fue una conversación de 2 minutos, luego se volvió a su mesa, acabo su comida y se fue a pagar. Antes de irse vino a mi mesa a decirme que ya había pagado mi comida también, y no quiso ni sentarse a charlar ya que tenía prisa. Le di las gracias y me di cuenta de lo diferentes que somos en otro tipo de países más ricos...